Imanol Sánchez: "Cada tarde es un final, una responsabilidad más en la que me juego mi futuro"
Nombre: Imanol Sánchez Vizcor
Fecha de nacimiento: 6 de noviembre de 1988
Lugar: Pedrola (Zaragoza)
Debut con picadores: 17 de septiembre de 2008
Apoderado actual: Curro Lamana
Fecha de nacimiento: 6 de noviembre de 1988
Lugar: Pedrola (Zaragoza)
Debut con picadores: 17 de septiembre de 2008
Apoderado actual: Curro Lamana
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¿Qué fue lo que hizo que desde pequeño soñara con ser torero? Desde muy pequeño en mi tierra, Aragón y Navarra, sentí fascinación por el mundo del toro, en concreto festejos populares, en encierros y capeas, dado que son muy tradicionales en esta zona.
Esta profesión es sacrificada y difícil, y los primeros pasos más aún, ¿cómo fueron sus inicios? Ya no son difíciles los primeros pasos, a medida que se avanza en esta profesión cada vez se complica más, los inicios fueron duros como los de ahora, pero con ilusión y sacrificio en el día a día se hace todo más llevadero.
¿Tres palabras con las que se defina Imanol Sánchez Vizcor como torero? Raza, pundonor y verdad.
¿El torero nace o se hace? Primero se nace, pero nadie nace con todo aprendido. Unos tienen más facilidad que otros para adquirir técnica, pero indudablemente el torear hace a uno, y sobre todo el entrenar sin descanso muchas horas al día es lo que le puede permitir torear.
Las tardes en el lugar de procedencia son diferentes para todos los diestros. En su caso, ¿qué le hace sentirse especial cuando torea en su tierra? Me siento obligado a no defraudar a toda esa gente que incansablemente cree en mí y me apoya sin cesar. Creo que al torear en mi tierra me siento más presionado de lo normal; en mi caso, al torear poco, cada tarde es una final, una responsabilidad más, en cada una soy consciente que está en juego mi carrera.
¿Cómo sería una tarde perfecta? Creo que todo el mundo sueña con ella, y nadie la ha conseguido, porque, por muy buena que sea, en una tarde siempre hay detalles que se quedan en el tintero.
Una actuación que haya quedado en su memoria. La última tarde en Zaragoza, que corte dos orejas a novillos bastante complicados de Don Antonio San Román. Y por supuesto, las dos tardes de 2010 y 2011 en Andorra (Teruel).
¿Cuáles son las ganaderías con las que se siente más cómodo?, ¿algún encaste en concreto que vea más complicado? No tengo predilección por ningún tipo de encaste, estoy abierto, y busco torear de todo tipo. En 2011 me vestí siete tardes de luces, y en cada una de ellas toreé un encaste distinto. Eso es lo que busco, dar un revulsivo a la Fiesta con este concepto del toreo, es decir, hacer faena a cualquier toro independientemente de su condición.
¿Con qué se encuentra más a gusto con el capote o con la muleta? Con la muleta, puesto que es la fase de la faena con la que verdaderamente se cortan las orejas.
Un torero al que admire. José Tomas, por su valor sincero, y por lo que representa para la Fiesta brava.
El tercio de varas. Me parece un tercio importantísimo y que últimamente se está desarrollando como un mero trámite. En realidad se le debería dar más importancia, ya que la Fiesta gira en torno al toro bravo, y la bravura y el respeto al animal se mide en este tercio.
¿Cómo os está afectando la crisis en esta profesión? Desde luego se nota en la reducción de festejos, sobre todo en novilladas. Es ahí donde hay más pérdidas y ya los empresarios no se arriesgan a organizarlas. Una buena manera de solucionar esto sería revisar el sueldo de todos; más aún, que la administración bajara el coste de los trámites burocráticos (IVA, Hacienda, Seguridad Social, etc…)
La plaza de Las Ventas ¿es tanto como dicen, que te lanza o te deja en el olvido durante algún tiempo? Desde luego que sí, es la plaza más importante del mundo. Sí te acartelas una tarde en Madrid, todas miradas están puestas sobre ti, por lo que tiene que ser así.
¿Cómo es el balance que haces de esta temporada en España? A pesar de que sólo me he vestido de luces en siete ocasiones, ha sido la temporada más redonda de mi carrera. Un total de 16 orejas y un rabo, destacando dos comparecencias en Zaragoza, y cortando en esa plaza 3 orejas. Y sobre todo destacando, como he comentado antes, que cada tarde toreé un encaste distinto.
¿Cómo definiría el momento actual por el que está pasando su carrera profesional? Con falta de contratos, creo que tengo mucho que decir pero sobre todo mucho que aprender.
Qué le dicen las palabras 'valor' y 'sacrificio' en su profesión. Valor: tener miedo y, aun así, enfrentarse a ese miedo. Sacrificio: algo necesario en el toreo y que tiene que convivir con nosotros en el día a día.
¿Cómo ve el futuro de la Fiesta? No es tan oscuro como se pinta, si todos permanecemos unidos, y sobre todo si se difunden los valores de la tauromaquia a los jóvenes. Hoy en día contamos con medios para ello, Internet, las redes sociales, etc.
Un consejo que le hayan dado y que le daría a los jóvenes que están empezando en esta profesión. Por mucho que se entre uno, siempre es poco.
Un miedo. Fracasar.
¿Con qué sueña Imanol Sánchez? Con ser una figura del toreo.
Imanol Sánchez, mucha suerte.
Esta profesión es sacrificada y difícil, y los primeros pasos más aún, ¿cómo fueron sus inicios? Ya no son difíciles los primeros pasos, a medida que se avanza en esta profesión cada vez se complica más, los inicios fueron duros como los de ahora, pero con ilusión y sacrificio en el día a día se hace todo más llevadero.
¿Tres palabras con las que se defina Imanol Sánchez Vizcor como torero? Raza, pundonor y verdad.
¿El torero nace o se hace? Primero se nace, pero nadie nace con todo aprendido. Unos tienen más facilidad que otros para adquirir técnica, pero indudablemente el torear hace a uno, y sobre todo el entrenar sin descanso muchas horas al día es lo que le puede permitir torear.
Las tardes en el lugar de procedencia son diferentes para todos los diestros. En su caso, ¿qué le hace sentirse especial cuando torea en su tierra? Me siento obligado a no defraudar a toda esa gente que incansablemente cree en mí y me apoya sin cesar. Creo que al torear en mi tierra me siento más presionado de lo normal; en mi caso, al torear poco, cada tarde es una final, una responsabilidad más, en cada una soy consciente que está en juego mi carrera.
¿Cómo sería una tarde perfecta? Creo que todo el mundo sueña con ella, y nadie la ha conseguido, porque, por muy buena que sea, en una tarde siempre hay detalles que se quedan en el tintero.
Una actuación que haya quedado en su memoria. La última tarde en Zaragoza, que corte dos orejas a novillos bastante complicados de Don Antonio San Román. Y por supuesto, las dos tardes de 2010 y 2011 en Andorra (Teruel).
¿Cuáles son las ganaderías con las que se siente más cómodo?, ¿algún encaste en concreto que vea más complicado? No tengo predilección por ningún tipo de encaste, estoy abierto, y busco torear de todo tipo. En 2011 me vestí siete tardes de luces, y en cada una de ellas toreé un encaste distinto. Eso es lo que busco, dar un revulsivo a la Fiesta con este concepto del toreo, es decir, hacer faena a cualquier toro independientemente de su condición.
¿Con qué se encuentra más a gusto con el capote o con la muleta? Con la muleta, puesto que es la fase de la faena con la que verdaderamente se cortan las orejas.
Un torero al que admire. José Tomas, por su valor sincero, y por lo que representa para la Fiesta brava.
El tercio de varas. Me parece un tercio importantísimo y que últimamente se está desarrollando como un mero trámite. En realidad se le debería dar más importancia, ya que la Fiesta gira en torno al toro bravo, y la bravura y el respeto al animal se mide en este tercio.
¿Cómo os está afectando la crisis en esta profesión? Desde luego se nota en la reducción de festejos, sobre todo en novilladas. Es ahí donde hay más pérdidas y ya los empresarios no se arriesgan a organizarlas. Una buena manera de solucionar esto sería revisar el sueldo de todos; más aún, que la administración bajara el coste de los trámites burocráticos (IVA, Hacienda, Seguridad Social, etc…)
La plaza de Las Ventas ¿es tanto como dicen, que te lanza o te deja en el olvido durante algún tiempo? Desde luego que sí, es la plaza más importante del mundo. Sí te acartelas una tarde en Madrid, todas miradas están puestas sobre ti, por lo que tiene que ser así.
¿Cómo es el balance que haces de esta temporada en España? A pesar de que sólo me he vestido de luces en siete ocasiones, ha sido la temporada más redonda de mi carrera. Un total de 16 orejas y un rabo, destacando dos comparecencias en Zaragoza, y cortando en esa plaza 3 orejas. Y sobre todo destacando, como he comentado antes, que cada tarde toreé un encaste distinto.
¿Cómo definiría el momento actual por el que está pasando su carrera profesional? Con falta de contratos, creo que tengo mucho que decir pero sobre todo mucho que aprender.
Qué le dicen las palabras 'valor' y 'sacrificio' en su profesión. Valor: tener miedo y, aun así, enfrentarse a ese miedo. Sacrificio: algo necesario en el toreo y que tiene que convivir con nosotros en el día a día.
¿Cómo ve el futuro de la Fiesta? No es tan oscuro como se pinta, si todos permanecemos unidos, y sobre todo si se difunden los valores de la tauromaquia a los jóvenes. Hoy en día contamos con medios para ello, Internet, las redes sociales, etc.
Un consejo que le hayan dado y que le daría a los jóvenes que están empezando en esta profesión. Por mucho que se entre uno, siempre es poco.
Un miedo. Fracasar.
¿Con qué sueña Imanol Sánchez? Con ser una figura del toreo.
Imanol Sánchez, mucha suerte.
Más información en: http://www.imanolsanchez.com